Cuando examinamos la situación actual, casi por reflejo, tendemos a olvidar el pasado y nos enfocamos sólo en el presente con el fin de predecir el futuro. Sin embargo, la Cronoestrategia viene a rebatir este concepto, dado que por un lado, la fluidez del Tiempo no es lisa y por otro lado, porque hay puentes. Cuando España completó la Reconquista en el año 1492, después de seis siglos, y fue liberada de los Arabes, se dió cuenta de que un nuevo peligro había aparecido desde el Este, ya que después de la caída de Constantinopla en 1453, el Imperio Otomano quería devorar a todo el Mediterráneo. Y tan pronto como el Imperio comenzó a ganar terreno en el Mediterráneo occidental, después de la caída de Rodas en 1522, la decisión fue tomada y Malta fue entregada a los Hospitalarios en 1530. Los Caballeros comenzaron inmediatamente a construir su defensa poliorcetícamente, porque sabían que aceptarían un ataque muy fuerte, debido a sus acciones contra la barbarie de la Sublime Puerta. Por lo tanto, se trata de una decisión de la Europa cristiana a nivel de alta estrategia. La isla de Malta fue entregada por el Emperador Carlos V, y Rey también de España desde 1556, a los Caballeros intrépidos que participaron en la Jornada de Túnez en 1535. En el año 1550 incendiaron el puerto de Mahdía, a donde se dirigirían los buques de guerra de Dragut, y terminaron recibiendo una terrible venganza en 1551, cuando toda la población de Gozo, la isla junto a Malta, fue esclavizada. En consecuencia, el Gran Sitio de Malta en 1565 fue un hecho esperado. Por lo tanto, después de la resistencia heroica de los Caballeros, los españoles ayudaron al final, y la liberación de Malta sostuvo todo el Mediterráneo Occidental, obligando a los otomanos, tras su derrota en 1571 en la batalla de Lepanto, a usar sólo rutas terrestres para atacar contra Europa.