Una de las aplicaciones más impresionantes de la zeolita en la agricultura es el tratamiento de la escarcha. Mientras que esta cualidad todavía no es bien conocida, es primordial para nuestros cultivos. Se debe a las características de la zeolita y es por esta razón que debemos ser cautelosos en el porcentaje de clinoptilolita de producto que pedimos, porque es él que hace todo. Es un tamiz molecular hidrófilo, capaz de absorber grandes cantidades de agua que libera después poco a poco. De esta manera la zeolita permite una regulación de agua interna y por lo tanto perturba la formación de hielo que es tan destructiva para los cultivos. La zeolita con esta cualidad es capaz de equilibrar la temperatura local, de hecho no solo protege a la fruta sino a la planta también. Junto con el fortalecimiento del sistema de raíces que hace que la planta sea más resistente, la presencia de la zeolita en la superficie de la tierra alrededor de las raíces y la pulverización de la zeolita crea una protección contra las heladas. De hecho, debemos utilizar la zeolita en las regiones que han sufrido las consecuencias devastadoras de la escarcha, ya que no tiene sentido para el agricultor que haga tantos sacrificios en vano. La zeolita como producto natural es adecuada para los cultivos orgánicos que son en promedio más vulnerables en las severas condiciones climáticas. Entonces, es importante pensar en utilizar zeolita antes del período en que se corre el riesgo de heladas porque es una pena tener problemas cuando conoces la solución.