12782 - Zeolita y alpechín
N. Lygeros
Traducción al español de Olga Raptopoulou
Durante la producción del aceite de oliva en Creta, en las almazaras también se produce el alpechín. El problema es que el alpechín afecta significativamente a las propiedades del suelo como por ejemplo, el pH y la conductividad eléctrica. Así, las rocas que contienen illita, ante los fenoles que existen en el alpechín, muestran una gran capacidad de absorción. O sea, en general existe el problema de la contaminación por los residuos de las almazaras dado que la mayoría de los productores del aceite de oliva hacen todo lo posible para deshacerse de su alpechín y causando así problemas ambientales que no están relacionados sólo con la química, sino también con el olor. Lo peor en este procedimiento, habitualmente ilegal, es que hay solución y sobre todo que es eficaz. La simple mezcla de zeolita con el alpechín permite la lucha directa contra el olor que molesta tanto. Se produce un zeo-barro que es inodoro y compacto. Además, esta mezcla de zeolita con el alpechín se puede utilizar como fertilizante e incluso de muy buena calidad, ya que han sido eliminadas, gracias a la zeolita, los metales pesados, las toxinas y los radicales libres que se han sido desactivados. De este modo, las sustancias químicas que son útiles, se pueden utilizar en los cultivos sin causar problemas. De esta manera, los productores ya cuentan con una herramienta muy útil para el aprovechamiento del alpechín sin entrar en un proceso que sería costoso.